Participación y representación son los dos brazos que articulan a la sociedad política. La Constitución de Venezuela lo expresa de manera clara en su artículo 62: “Todos los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho de participar libremente en los asuntos públicos, directamente o por medio de sus representantes elegidos o elegidas. La participación del pueblo en la formación, ejecución y control de la gestión pública es el medio necesario para lograr el protagonismo que garantice su completo desarrollo, tanto individual como colectivo. Es obligación del Estado y deber de la sociedad facilitar la generación de las condiciones más favorables para su práctica”.
¡Acompáñame a recorrer nuestro tiempo con sentido crítico y positivo! Mercedes Malavé