Ir al contenido principal

El espejismo del personalismo


Quizás Hannah Arendt sea la filósofa que más haya estudiado la gestación del totalitarismo de Estado. Uno de los conceptos básicos que utiliza para explicar este fenómeno es el de "masa o multitud", que no es otra que cosa que un número creciente de ciudadanos que no se integran en ninguna organización en pro del interés común, ya sean partidos políticos, organizaciones municipales, parroquiales, profesionales, sindicatos, gremios, etc. A esto contribuye el discurso de la antipolítica del que últimamente se habla bastante porque fue el que nos llevó –como nación– a creer en Chávez, un líder militar. Por eso, quisiera centrarme más bien en cómo los partidos políticos también pueden contribuir a esta masificación del individuo.

Cuando las elites políticas no se comprometen en la formación de ciudadanos plenamente conscientes de su rol político, o cuando no se ocupan de que su organización funcione como debe, no solo en momentos de elecciones sino siempre, descuidando así fomentar la participación y el pluralismo en la toma de decisiones desde las bases, atendiendo a los problemas concretos de cada localidad, enseñando a dirimir las diferencias con otros actores políticos, y procurando el bien común, entonces ellas están fomentando la masificación o la anulación del ciudadano.

Principal responsabilidad tienen los partidos políticos en esta materia. La esencia de una organización política no es otra que la formación de líderes a todo nivel. Un partido político posee un ideario, una doctrina, que permite alcanzar las mayores cuotas de convocatoria y movilización cívica de una nación; y cada líder está llamado a reunir al mayor número posible de personas, con nombre y apellido, a que se sumen a esta gran obra común; cada uno hasta donde sus fuerzas y capacidades le permitan.

Un espejismo de todo esto sería un proyecto personalista de partido. Un líder con cierta tendencia al autoritarismo que, abusando de sus mejores capacidades de organización y convocatoria, utiliza y manipula otros liderazgos menores para su propio encumbramiento. Las personas que se adhieren a su "ideal", en un primer momento se sienten promovidas y proyectadas en dicho sujeto, pero luego se desencantan al comprobar que son parte del montón, cooperadores de la masificación. Para detectar que un partido tiende al personalismo, basta con medir los niveles de pragmatismo con el que sus principales líderes se expresan en reuniones internas. Sólo les importa ser eficaces en la maquinaria. No son formadores sino organizadores y propagandistas, difusores de mensajes y consignas. Cuidado.

Ante la crisis política y económica que estamos atravesando, es normal que nos sintamos decepcionados frente a los liderazgos políticos, y, debido a la desestructuración del tejido social que nos reúne como pueblo, podemos pensar que no haya salida cívica sino militar. Pero dicha tristeza podemos convertirla en reflexión, en ponderación, en evaluación de los liderazgos. No caigamos en generalizaciones peligrosas que llevan a callejones sin salida. Sepamos decantar.

@mercedesmalave

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Capítulo 1: La inspiración filosófica. Filosofía en la calle

Por  Santiago Fernández Burillo Haz click para descargar el curso completo  Haz click para descargar el plan de evaluación I. La inspiración filosófica II. El materialismo común III. El "culturalismo", o relativismo postmoderno   I. La inspiración filosófica La filosofía en la calle En muchas ciudades de nuestro país hay alguna vía pública que lleva el nombre de «Balmes». El filósofo de Vic, Jaime Balmes (1810-1848) es un "clásico" moderno, su pensamiento posee actualidad. Es interesante observar que, por lo general, a esas calles o plazas no se les ha modificado el nombre a pesar de los cambios de régimen político que se han sucedido. Nunca ha parecido necesario marginar a Balmes; es patrimonio común. Existe también una filosofía clásica, una  philosophia perennis,  patrimonio de todas las generaciones, que a la vez es un saber maduro y una búsqueda abierta. La característica principal de los clásicos es su «actualidad». También las

¿Puede el cuerpo castigar la maternidad?

El valiente testimonio de Irene Vilar: Ser madre tras quince abortos ¿Puede haber mujeres adictas al aborto? ¿Puede el cuerpo rechazar habitualmente la vida después de haber abortado muchas veces? Irene Vilar es una mujer estadounidense de origen puertorriqueño autora del libro Impossible Motherhood. En una entrevista concedida a L’Express.fr  narra su experiencia tras haber abortado quince veces y luego haber sido capaz de acoger la vida de sus dos hijas. Transcribo la entrevista, creo que vale la pena reflexinar sobre este tema en el mes de la madres : Irene Vilar tenía sólo 16 años cuando conoció a un hombre que cambiaría su vida, “un profesor de literatura latino-americana cuarenta y cuatro años mayor que ella”. Durante 17 años, viviría con él una “pasión destructiva que la llevó a someterse hasta a quince abortos” y varios intentos de suicidio. Ella habla de “adicción al aborto”. Actualmente casada de nuevo y madre de dos niñas, ve su maternidad como una especie de

Tenía Razón el Principito

Celebramos con alegría los 70 años de El Principito .  Se trata de una edad joven para un clásico de la historia de la literatura. Vale le pena que nos paseemos un poco por el planeta de sus ideas... por ese mundo de las esencias y de las verdades profundas que encierran las aventuras de un niño brillante.