Para no caer en romanticismos ni demagogias habría que dar una respuesta apegada a la definición, con el riesgo de resultar chocante a la que parece ser la mentalidad dominante contemporánea: Milito en un partido político porque aspiro al poder público. De hecho, la definición de Giovanni Sartori es precisa al respecto: un partido es “cualquier grupo político que se presenta a elecciones y que puede colocar mediante ellas a sus candidatos en puestos públicos”.
¡Acompáñame a recorrer nuestro tiempo con sentido crítico y positivo! Mercedes Malavé