Ir al contenido principal

Virtudes en clave de Sol. DO: Dominio de sí

Siguiendo la imagen de mi entrada anterior, podemos analizar algunas virtudes fáciles de recordar según el curso de las notas musicales en clave de sol: 



DOminio de sí
REsponsabilidad
MIsericordia
aFAbilidad
SOLidaridad
LAboriosidad
SInceridad
DOnación


Comencemos por esa noble cualidad que nos ayuda a ser capaces de dominarnos a nosotros mismos para dar siempre lo mejor de cada uno. Hoy por hoy sabemos que el dominio de sí forma parte de las tareas de la inteligencia, y no sólo de la fuerza de voluntad, gracias a los descubrimientos de la psicología que giran en torno a la así llamada inteligencia emocional. Dominarse a sí mismo consiste, pues, en la capacidad de armonizar, mediante el uso de la razón, las propias respuestas de la conducta frente a todo aquello que impacta fuertemente en nosotros y nos hace reaccionar apasionadamente. Dominarse a sí mismo consiste en graduar las manifestaciones de atracción o repulsión, de ira, de miedo, de amor, de odio, etc.

Quienes gozan de un buen dominio de sí casi siempre se apoyan en dos actitudes fundamentales que involucran plenamente nuestra capacidad de conocer. En primer lugar son personas que se conocen bien a sí mismas, que han aprendido a discernir, en el conjunto de situaciones en las que se han visto envueltos, las reacciones automáticas que se producen en ellos. Para llegar a esto hace falta reflexionar, pararse a pensar unos minutos al final del día sobre las cosas que nos han pasado e ir sacando conclusiones acerca del propio temperamento. De este modo, se aprende a estar prevenido al momento de recibir el impacto emocional, para gestionarlo del mejor modo posible. Todo esto es muy bueno, sin embargo no es suficiente.

En segundo lugar, el dominio de sí requiere, junto a un buen conocimiento propio, la capacidad de desprenderse de uno mismo, es decir, de habituarse a no dar demasiada importancia a lo que nos pasa o a cómo nos sentimos. Suena fuerte y duro decirlo pero sabemos que la pura verdad consiste en que no somos el centro del universo, ni de la historia, ni de las personas. El que las cosas nos afecten, o no nos afecten, no cambia el curso de las acciones de los demás, ni mejora las condiciones climáticas, ni el despiadado paso del tiempo y mucho menos modifica el modo de ser de cada persona con la que nos relacionamos. Nada ni nadie se mueve sólo según nuestra propia conveniencia aunque, afortunadamente, muchas cosas que pasan nos son favorables. A esta actitud realista ante la vida y ante el acontecer diario la podemos llamar humildad.

Con lo cual, conocimiento propio y humildad, en conjunto, son la clave para llegar a tener auténtico dominio de sí. Luego, hay una serie de técnicas tales como aprender a respirar, a contar hasta diez, a controlar los pensamientos y la imaginación para no dar vueltas y vueltas a aquello que nos afecta, etc., etc., etc. Una buena autoestima también potencia el dominio de sí. Pero si los pilares del techo no están bien fijados, éste no se sostiene por más técnicas que se empleen para levantarlo.

Ahora que tenemos tan presente la figura de Nelson Mandela, debido a su crítico estado de salud, podemos aprovechar su ejemplo para comprender el alcance que puede llegar a tener una persona cuando ha cultivado un liderazgo auténtico, construido desde las bases de un gran dominio de sí mismo. Una de las situaciones más difíciles de sobrellevar es la injusticia. Mantener una actitud pacífica y serena cuando se comete una injusticia contra nosotros, constituye una prueba de fuego para el dominio de sí. Pues así fue la vida de Mandela, que estuvo dispuesto a sacrificar su libertad, sus pasiones, sus reacciones, toda su vida, por la libertad de su pueblo. Mandela supo esperar pacientemente sin abandonar su causa. Alcanzó un sano dominio de su cuerpo mediante una disciplina mental y física que ejercitó diariamente con mucha constancia, aun sintiéndose en ocasiones débil y desanimado. Aprendió a controlar su ira, sus rechazos, sus prejuicios, su impotencia. Y quizás sea la humildad la mayor lección que nos ha dejado Mandela cuando supo asumir el poder y luego dejarlo sin retenerlo ni un día más de lo que correspondía según las leyes electorales de su país, aun siendo el más grande héroe de la historia contemporánea de Sudáfrica.

Muy claras fueron las palabras de Benedicto XVI en una ocasión en la que se refirió a la importancia de vivir esta virtud en nuestro tiempo: “La crisis de nuestro tiempo depende principalmente del hecho de que se nos quiere hacer creer que se puede llegar a ser hombres sin el dominio de sí, sin la paciencia de la renuncia y la fatiga de la superación, que no es necesario el sacrificio de mantener los compromisos aceptados, ni el esfuerzo para sufrir con paciencia la tensión de lo que se debería ser y lo que efectivamente se es”.


Como apunté anteriormente, el dominio de sí no depende sólo de la fuerza de voluntad. Dominarse no debe confundirse, bajo ningún concepto, con reprimir, apretar los dientes, aguantar lo más posible. Puede ser que en algunas ocasiones no quede más remedio que padecer estos esfuerzos, pero prolongar en el tiempo este modo de ser puede llevarnos a la explosión psíquica. Conviene por tanto buscar razones, aprender a ser amigos de la verdad de las cosas, reconciliarnos con la realidad que a cada uno nos toca afrontar convencidos de que los males nos pueden traer grandes bienes. En ocasiones, desahogarse con un buen amigo y contarle lo que nos afecta puede ser un excelente remedio para retomar el camino de la paciencia, del perdón y de la verdad. 
  

   


Comentarios

Reconozco la importancia y la dificultad que significa el dominio de uno mismo y en particular, el darle la medida justa a nuestras emociones, sentimientos y vivencias. Y me veo reflejada en esa necesidad de elevar mi propio dominio, antes de pasar a buscar afuera, lo que necesito primero lograr adentro.
Excelente reflexión y me encanta la relación que haces con la música y los instrumentos. Seguiré leyendo.
Rosanna
PROFESORA DIB dijo…
Muy original el enfoque! Se le puede añadir música!

Entradas más populares de este blog

El hombre relacional: apetitos, deseos y hábitos

Hemos visto que la realidad viene interiorizada por el hombre gracias al conocimiento : “El conocimiento es una relación entre un sujeto y un objeto: Lo que distingue al conocimiento de las demás actividades inmanentes [interiores] que hallamos en los seres vivientes, es que establece una relación sui generis entre dos términos correlativos que pueden llamarse, en lenguaje moderno, el sujeto y el objeto” (Vernaux: 38). Dicha relación establece una unión que es “radicalmente distinta de la síntesis física o química, en la que cada elemento pierde su naturaleza propia y se funde en un todo (…). En el conocimiento, el sujeto, aun permaneciendo él , capta el objeto como tal, como distinto, como diferente de él ” (Vernaux: 39). Si el conocimiento implica una relación –o asimilación– que no supone la anulación de lo conocido, entonces, el hombre permanece en una continua referencia hacia las cosas y las personas que conoce . Esta relación nos habla de una apertura fundamental del hombre h...

Bovarismo criollo

A Jules de Gaultier le debemos el hallazgo de ese curioso mal que aqueja a los personajes de Flaubert, inmortalizado en Emma Bovary. Se trata de la tendencia a concebirse distinto de como se es. “Todo hombre, en el fondo, es un bovarista” decía Antonio Caso. Ninguno de nosotros es libre de espejismos, máxime en un mundo donde un App o un laboratorio de tuits, construye, crea y convierte la ficción en información -síntesis apretada del fenómeno de la posverdad-. Basta que una idea o fantasía se asome en la conciencia para que los individuos tiendan a volverla realidad: “Nos vamos sacrificando a nuestra mentira”, sentenciaba precipitadamente el filósofo mexicano.   Así las cosas, el impulso bovarista o inclinación a pensarnos diverso de como somos en realidad, constituye la fábrica por excelencia de idealismos, utopías o ideologías autorreferenciales. Basta que el individuo que pretenda encarnar su falsa idea de sí sea un líder carismático para que aquello cunda por doquier, apoyánd...

Con ojos nuevos

La nueva Asamblea Nacional se instalará el próximo 5 de enero sin mayores novedades. Los nuevos diputados son viejos conocidos: tanto los del chavismo como los de la oposición. En estas elecciones volvió a perder Venezuela, como lo viene haciendo en el transcurso de este siglo que no termina de arrancar para nosotros. Seguimos postergando las soluciones a los gravísimos problemas estructurales, institucionales y humanos que nos aquejan: continuará el flagelo del hambre y el alto costo de la vida, la crisis inaudita de servicios básicos, la escasez de gasolina y un largo etcétera. La consulta popular y la nueva directiva del parlamento legítimo que propone el diputado Juan Pablo Guanipa y su partido, como alternativa de gobierno para el año 2021, acentuará la lógica del dualismo de poderes y sus consecuencias: sanciones y bloqueos, control de activos en el exterior, atentados contra la soberanía, salidas de fuerza, seguirán formando parte de la agenda de un sector político que aún cons...